Un estudio indica que la población de EEUU está alcanzando una mayor esperanza de vida, pero solamente en individuos que tienen más de 12 años de educación.
Se ha comprobado que las personas que poseen más de 12 años de educación pueden vivir hasta los 82 años, en cambio, aquellos que estudiaron 12 años o menos sólo alcanzan una esperanza de vida de 75 años.
El interrogante que surge de esta investigación es a qué se debe la diferencia en la esperanza de vida entre distintos niveles educativos. Al parecer la respuesta está en el tabaco, entre otros factores que contribuyen a la calidad de vida.
Alrededor de la quinta parte de la diferencia en mortalidad entre los grupos más educados y los menos educados podría deberse a enfermedades asociadas al hábito de fumar, como el cáncer de pulmón y el enfisema, indicó la autora principal del estudio.
Asimismo, la diferencia en la mortalidad puede ser la causa de diferencias económicas, ya que a menor nivel educativo suele ser más probable la existencia de menores ingresos. Si ésto es así, el menor nivel socioeconómico expone a los individuos a mayor cantidad de factores de riesgo sobre la salud y menores factores protectores de la misma.
Los investigadores observaron que en el período de 1990 a 2000 el grupo de población con mayor nivel educativo había incrementado su esperanza de vida en 1.6 años. Sin embargo, para los menos educados la esperanza de vida no había aumentado en lo absoluto.
Si bien es sabido que la educación influye en la calidad de vida de las personas, nunca tomamos conciencia de la gran importancia que ésta tiene para la salud, a tal punto que puede verse modificada la esperanza de vida según el nivel educativo.
Es fundamental asumir mayores cuidados para mejorar la salud y con ésta la calidad de vida en general, pero para ello, es de suma relevancia incorporar conocimientos generales e información específica al respecto.
Fuente: terra.com